« Flotamos en una nube » : Dos bretones coronados campeones del mundo de la pizza

« Estamos en una nube » expresa bien el estado de ánimo de Cyrille Auffret y Jérôme Gourmelen, dos bretones que acaban de ganar el campeonato del mundo de pizza en Menton. Orgullosos de sus raíces, este dúo es un ejemplo de pasión y saber hacer, habiendo sabido fusionar tradición e innovación para crear recetas que sorprenden. Su pizza de paloma, fusión de sabores bretones y exóticos, ha sabido seducir al jurado y a los espectadores.

¿Quiénes son Cyrille Auffret y Jérôme Gourmelen?

Cyrille Auffret y Jérôme Gourmelen, dos apasionados de la pizza, han hecho recientemente rumores en todo el mundo. Su presencia en el campeonato del mundo de pizza, que tuvo lugar en Menton los días 5 y 6 de noviembre de 2024, estuvo marcada por una actuación excepcional. Cyrille, gerente de la pizzería La main à la pâte en Trégunc, y Jérôme, chef estrella de l’Ar Men Du en Névez, se unieron para presentar creaciones que cautivaron a los jueces.

Su trayectoria está marcada por el éxito y la pasión por la gastronomía bretona. Ambos chefs no solo se limitan a respetar las tradiciones; innovan, y su receta que integra paloma de los Monts-d’Arrée y cítricos japoneses ha sabido captar la atención. Su colaboración, que combina saber hacer artesanal y creatividad, los convierte en figuras destacadas en el muy competitivo mundo de la pizza.

¿Cómo se desarrolló esta competición?

La competición se llevó a cabo durante dos intensos días, donde cada participante tuvo la oportunidad de presentar sus mejores creaciones. Cyrille y Jérôme demostraron un talento notable, ganando un total de cuatro premios, incluyendo el primero por su pizza dulce. También lograron alcanzar la cima del ranking general con su pizza Breizh Hato, que encantó tanto al jurado como al público.

Los resultados son testimonio del compromiso y de la preparación meticulosa que les permitió destacarse. Además de ganar los primeros lugares, demostraron que los productos locales pueden combinarse de manera sorprendente con influencias asiáticas, creando así un diálogo culinario fascinante. Su victoria es una hermosa historia de amistad y cooperación que resuena con la cultura bretona.

¿Cuál es la receta ganadora?

El secreto de su éxito radica en parte en su receta original, la Breizh Hato. Aquí están los elementos clave que componen este plato único:

  • Paloma de los Monts-d’Arrée: una ave sabrosa, criada localmente.
  • Cítricos japoneses: añadiendo un toque de exotismo y una nota dulce.
  • Masa casera: preparada con cuidado, ofreciendo ligereza y crujiente.
  • Salsas elaboradas: mezclas innovadoras que realzan los sabores.

Cada ingrediente es cuidadosamente seleccionado por sus cualidades gustativas y su origen. Cyrille y Jérôme insisten en que la frescura y la calidad de los productos hacen toda la diferencia en la realización de su pizza. Recorrentemente visitan los mercados locales para conseguir los ingredientes más frescos y sabrosos.

¿Cuál es su reacción ante la victoria?

« Estábamos en una nube », confiesa Cyrille Freude. Su reacción es comprensible: es el resultado de un arduo trabajo y un sueño realizado. El dúo, al ganar el título de campeones del mundo, no solo ha realizado un sueño personal, sino que también ha llevado alto los colores de la Bretaña y de sus tradiciones gastronómicas. Con esta victoria, desean inspirar a los jóvenes chefs y fomentar la valorización de los ingredientes locales.

« Estamos realmente muy contentos », añade Jérôme, expresando su gratitud hacia aquellos que los han apoyado a lo largo de este camino. Este reconocimiento no es solo una medalla, es el reconocimiento del compromiso que tienen por su oficio. También les abre muchas oportunidades para desarrollar su carrera y compartir su pasión con un público más amplio.

¿Qué representan estos títulos para Bretaña?

Las victorias de Cyrille y Jérôme no son solo una celebración personal; también representan un triunfo para la cocina bretona. Con este reconocimiento internacional, la región se coloca en el mapa de la gastronomía mundial. Este éxito podría alentar a otros chefs a explorar diversos estilos culinarios, integrando el espíritu local mientras juegan con influencias exteriores.

El impacto de este evento resuena más allá de las fronteras bretonas. Muchos restauradores se inspiran en sus creaciones y adoptan métodos similares. Esto es testimonio de un creciente movimiento en la comunidad culinaria bretona hacia la exploración de nuevos horizontes al tiempo que se honra el patrimonio local.

¿Cuáles son los futuros proyectos de Cyrille y Jérôme?

Después de esta hermosa victoria, el dúo tiene nuevos desafíos por delante. Con sus estanterías ya bien llenas de trofeos, planean ampliar su colección, pero también extender su red. Consideran colaborar con otros chefs, organizar talleres para compartir sus técnicas y presentar su visión de la pizza en nuevos establecimientos.

De hecho, el éxito genera oportunidades para conocer a otros apasionados y desarrollar intercambios culturales enriquecedores. Estos proyectos simbolizan su deseo de ir más allá del simple reconocimiento, promoviendo la gastronomía bretona a nivel internacional. Se trata de una verdadera iniciativa de implicación comunitaria, donde desean crear un círculo de inspiración en torno a su pasión común.

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La reciente victoria de Cyrille Auffret y Jérôme Gourmelen en el campeonato del mundo de pizza en Menton es una verdadera oda a la pasión bretona. Estos dos artesanos han sabido combinar tradición e innovación con su obra reconocida, la pizza Breizh Hato, integrando ingredientes de la tierra como la paloma de los Monts-d’Arrée. Su éxito demuestra que la gastronomía bretona puede brillar en el escenario internacional, consolidándose como una referencia en materia de pizzas de calidad.

El entusiasmo palpable de los galardonados, que exclamaron: « Estamos realmente en una nube », testimonia el impacto emocional de tal logro. Los elogios recibidos destacan no solo su técnica, sino también su creatividad. Al obtener cuatro premios, incluido el primero por la pizza dulce, estos chefs ilustran perfectamente la audacia de los artesanos bretones para superar los límites de su arte.

Mientras sus trofeos ya se exhiben en su establecimiento, la pizzería La main à la pâte, el futuro se presenta radiante para estas dos personalidades. Su éxito es una gran promesa para la gastronomía bretona, invitando a descubrir otros tesoros culinarios como los celebrados en eventos como la Celebración de la pizza. Solo queda seguir sus pasos, porque han logrado redefinir lo que representa la pizza en el corazón de la cultura bretona.

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