Ingredientes
Receta para 4 personas.
| 🦆 1 hígado graso crudo entero de pato (500 a 580 g) | 🧂 4,8 g de sal fina (es decir, 1 cucharadita colmada) |
| 🌶️ Pimienta (al gusto) | 🍷 Vino dulce (como blanco o oporto, según tus preferencias) |
Utensilios
| 🧑🍳 Terrina de porcelana | 🔪 Cuchillo |
| 🌊 Plato hondo | 🧂 Cucharita |
| 🌡️ Termómetro de cocina | 🥄 Espátula de silicona |
| 🛁 Papel sulfurizado | 🥣 Bol |
Preparación paso a paso
Tiempo total de cocción: 1 hora 30 minutos
Tiempo de preparación: 15 minutos
Tiempo de reposo: 1 hora
Tiempo de cocción: 1 hora 15 minutos
PASO 1: Empieza sacando el hígado graso del refrigerador aproximadamente 30 minutos antes de comenzar la preparación.
PASO 2: Remoja los lóbulos de hígado en agua tibia con sal durante 1 a 2 horas para ablandar y desalgar.
PASO 3: Después de la remojo, limpia delicadamente el hígado graso retirando las venas y las impurezas visibles.
PASO 4: Sazona el hígado graso con sal, pimienta y, opcionalmente, especias como porto o vino dulce.
PASO 5: Coloca el hígado en una terrina de porcelana, presionando ligeramente para eliminar las burbujas de aire.
PASO 6: Cubre la terrina con una tapa o papel sulfurizado, luego colócala en un plato lleno de agua caliente.
PASO 7: Hornea el plato en el horno precalentado a 120°C para una cocción suave durante aproximadamente 1 hora.
PASO 8: Verifica la cocción con un termómetro; la temperatura interna debe alcanzar aproximadamente 55°C para un hígado a punto.
PASO 9: Deja reposar el hígado graso a temperatura ambiente antes de transferirlo al refrigerador para enfriarlo completamente.
PASO 10: Después de varias horas de reposo en frío, tu hígado graso está listo para ser cortado y degustado.
Preparar un hígado graso casero es mucho más accesible de lo que se piensa. Con unos pocos pasos simples, puedes realizar un plato refinado que deleitará a tus invitados. La elección de un hígado graso de calidad es primordial para obtener un resultado sabroso. No olvides disfrutar bien de tu creación para apreciar las sutilezas de cada sabor.
El sazonamiento es un momento clave para personalizar tu receta de acuerdo a tus deseos. Ya sea que optes por una sutil mezcla de sal y pimienta o la adición de algunas especias, cada detalle cuenta. Piensa también en cuidar la presentación, ya que un hígado graso bien presentado es un verdadero deleite para los ojos.
Esta preparación puede transformar una comida tradicional en una experiencia gastronómica memorable. No dejes que el misterio del hígado graso te detenga, anímate y sorprende a tus seres queridos con este plato casero.
