La polenta cremosa es un plato italiano tradicional que ha sabido conquistar los paladares del mundo entero. Se trata de una mezcla de harina de maíz y líquido, generalmente agua o caldo, cocida hasta obtener una textura suave y cremosa. Este plato es increíblemente versátil, pudiendo servirse como acompañamiento, plato principal o incluso como postre, dependiendo de los ingredientes que le añadas. Aquí tienes una receta de polenta cremosa fácil de realizar y deliciosa que puedes probar en casa.
Ingredientes
- 1 taza de polenta (harina de maíz)
- 4 tazas de líquido (agua, caldo de verduras o de pollo)
- 1 cucharadita de sal
- 1/2 taza de queso parmesano rallado
- 2 cucharadas de mantequilla
Preparación
- Calienta el líquido hasta que hierva en una cacerola a fuego medio.
- Agrega la sal.
- Vierte lentamente la polenta en el líquido hirviendo, mientras remueves constantemente para evitar que se formen grumos.
- Baja el fuego y deja que la polenta hierva a fuego lento, removiendo de vez en cuando, hasta que espese y se vuelva cremosa. Esto debería tomar unos 30 minutos.
- Retira la cacerola del fuego y añade la mantequilla y el queso parmesano rallado. Remueve bien hasta que la mantequilla y el queso estén completamente derretidos e incorporados a la polenta. Tu polenta cremosa ya está lista para ser servida.
Cómo disfrutar de la polenta cremosa
La polenta cremosa es deliciosa tal cual, pero también puedes acompañarla con diversas guarniciones para hacerla aún más sabrosa. Puedes servirla con verduras asadas, pollo rostizado, ragú de res o champiñones salteados. Si prefieres degustarla como postre, simplemente añade un poco de azúcar o miel y adorna con frutas frescas.
Conclusión
La polenta cremosa es un plato reconfortante y versátil que puede prepararse en un abrir y cerrar de ojos. No dudes en experimentar con diferentes líquidos y guarniciones para crear tu propia versión de este plato italiano clásico. ¡Buon appetito!